Titulares

Finalizan Fiestas Patronales en honor a Nuestra  Señora de los Remedios

El domingo 8 de septiembre, finalizaron las fiestas patronales que se venían realizando desde el pasado 30 de agosto, en la parroquia del municipio de Cabral, en honor a Nuestra Señora de los Remedios. La Eucaristía Solemne fue presidida por Monseñor Andrés Napoleón Cárdenas, Obispo de la Diócesis Barahona y concelebrada por el Rvdo. Padre Nico Saint Louis, párroco y Fray Arístides.  

Los días posteriores, realizaron el rosario de la Aurora, la celebración de la eucaristía con los temas: modelo de fe, estrella de la mañana, trono de la sabiduría, madre de las vocaciones, madre de los apóstoles, consuelo de los afligidos, auxilio de los cristianos, refugio de los pecadores y madre de la esperanza.

Con la participación de diversas personalidades que hacen vida en el municipio de Cabral.

Historia de Nuestra señora de los remedios:

Nuestra señora de los remedios es un título dado a la virgen María, madre de Jesús, en la iglesia católica. Este título está asociado con la creencia de que María puede traer alivio y sanación a quienes le rezan.

La historia de Nuestra señora de los remedios se remonta al siglo XVI, cuando los conquistadores españoles trajeron la imagen de la virgen María a Filipinas. La imagen estaba consagrada en una iglesia en manolos, Bulacán, y era conocida como Nuestra señora de los remedios.

La iglesia se convirtió en un popular lugar de peregrinación y mucha gente acudía a rezarle a María para que la curara y la protegiera. La fiesta de Nuestra señora de los remedios se celebra cada 8 de septiembre.

Oración a Nuestra señora de los remedios

Oh santísima virgen María, Nuestra señora de los remedios, refugio de los pecadores y salud de los enfermos, con amorosa confianza nos ponemos bajo tu maternal cuidado. Te suplicamos, pidiendo tu poderosa intercesión, para que obtengamos la gracia de verdadero arrepentimiento. Perdón total de nuestros pecados y firme resolución de enmendar nuestra vida. Te pedimos que nos obtengas de tu Divino Hijo. La gracia de perseverar en la fe, vivir siempre en la esperanza y permanecer firmes en la Caridad. Amén

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