Tres mil 900 familias en República Dominicana están sufriendo las consecuencias que se derivan del escándalo que envuelve una suma multimillonaria de dólares del escándalo de soborno de la empresa constructora ODEBRECHT.
Luego del escándalo, esa empresa ha tirado a la calle a 3 mil 900 empleados que laboraban en proyectos que estaba ejecutando esa institución y que han sido paralizados producto del escándalo.
Las obras afectadas son la carretera Piedra Blanca-Cruce de Ocoa, la Terminal Marítima Sabana de la Mar-Samaná y las Ecovías (Conjunto de Obras Viales) de Santiago de los Caballeros.
La paralización ha sido dispuesta porque Odebrecht no ha recibido los correspondientes recursos que el Estado dominicano debía entregar para continuar dichos trabajos, dijeron las fuentes, las cuales no entraron en detalles al respecto.
En estos momentos, la única que se mantiene, pero bajo muchos cuestionamientos de soborno y sobre evaluación, es la termoeléctrica Punta Catalina.
El escándalo ha estallado luego de que se denunciara que Odebrecht pagó sobornos por 92 millones de dólares a políticos, legisladores y funcionarios dominicanos a cambio de ser favorecida con la asignación de obras del Estado.