Los feminicidios, suicidios, crímenes, robos, asaltos, secuestros, saqueos de viviendas, incluyendo las de un general activo de la Policía Nacional, marcaron el finalizado 2017. Las muertes de mujeres, incluyendo menores de edad, a manos de sus parejas o ex parejas se incrementaron vertiginosamente en el año que llegó a su fin el pasado domingo a […]
Los feminicidios, suicidios, crímenes, robos, asaltos, secuestros, saqueos de viviendas, incluyendo las de un general activo de la Policía Nacional, marcaron el finalizado 2017.
Las muertes de mujeres, incluyendo menores de edad, a manos de sus parejas o ex parejas se incrementaron vertiginosamente en el año que llegó a su fin el pasado domingo a las 12:00 de la medianoche.
Estos hechos alarmaron la sociedad dominicana y diversos sectores del país externaron su preocupación, pidieron al gobierno poner freno a esas acciones.
Las iglesias católicas y evangélicas, psiquiatras, psicólogos, sociólogos, organizaciones feministas e instituciones gubernamentales abordaron la problemática con cierta preocupación.
Los feminicidios han dejado una estela de dolor incurable en los familiares de las víctimas, padres devastados, hijos huérfanos y una sociedad consternada y, a la vez, preocupada.
Se calcula que más 800 niños han quedado en la orfandad, entre ellos huérfanos de padre y madres porque han ocurrido casos de que hombres han matado a sus compañeras sentimentales luego se quitaron la vida.
Se calcula que un promedio de 102 mujeres son asesinadas cada año en el país por sus compañeros sentimentales o exparejas, pero el año 2017 la cifra fue mucho mayor.
